Durante
las tres primeras temporadas de ‘Glee’ hemos podido ver las vivencias
del coro del instituto McKinley. Por ello, y al igual que pasa en todas
las series que basan sus tramas en un grupo de estudiantes llegó el
momento de renovarse o morir, y eso fue lo que hizo Ryan Murphy, el
productor decidió utilizar una estrategia mixta, y en la cuarta
temporada de la serie dividió prácticamente la serie en dos.
Este cambio de estrategia en las tramas
ha servido para darle una nueva vida a la serie, ya que según ha
declarado el propio Ryan Murphy, querían “repoblar la serie con nuevos
personajes”. “La serie ha encontrado una nueva energía y los actores son
mucho más felices por que ninguno está teniendo que matarse a trabajar
ocho días a la semana” para poder sacara delante todas las tramas, ha
asegurado.
Sobre el futuro de la serie, Ryan Murphy
ha declarado que le gustaría hacer cuatro temporadas más ahora que han
encontrado qué es lo que realmente funciona al producto. En ese tiempo
se podría ver una segunda graduación, y como los nuevos personajes
llegan también a la universidad. Al mismo tiempo que los veteranos
también terminarían con esa etapa de su educación.
De momento, la idea que se barajó de
realizar un spin-off centrándose en los personajes principales de la
primera generación se ha descartado y se han mantenido todos en la serie
madre. Algunos de ellos incluso mejorando su situación, como es el caso
de Chord Overstreet, quien ha pasado de ser un personaje secundario a
uno de los regulares en las nuevas tramas
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